La Regulación de la Inteligencia Artificial en México: Hacia un Enfoque Responsable y Ético
La inteligencia artificial (IA) está transformando el panorama global, ofreciendo oportunidades sin precedentes en sectores como la salud, la educación, la seguridad y los negocios. Sin embargo, también plantea desafíos éticos, sociales y legales que requieren una atención urgente. En febrero de 2024, el senador Ricardo Monreal Ávila presentó la propuesta de la Ley Federal que Regula la Inteligencia Artificial en México, un esfuerzo pionero para abordar estos retos y garantizar el desarrollo responsable de la IA en el país.
Un Contexto de Innovación y Riesgo
Según la iniciativa, los sistemas de inteligencia artificial (SIA) tienen el potencial de generar beneficios significativos en diversas áreas, como la mejora de servicios públicos, el aumento de la productividad económica y la generación de oportunidades laborales. No obstante, también se reconoce que el mal uso de estas tecnologías puede exacerbar desigualdades, discriminar a grupos vulnerables y violar derechos humanos. Por ello, se plantea un marco normativo basado en un enfoque de riesgos que clasifica los sistemas de IA en tres niveles: bajo, alto e inaceptable.
Clasificación de los Sistemas de IA y sus Implicaciones
La ley propuesta establece categorías claras para regular los SIA según su nivel de riesgo:
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Sistemas de riesgo inaceptable: Incluyen aplicaciones que puedan causar daño físico o psicológico grave, como la manipulación subliminal de comportamientos, el uso indebido de datos biométricos en espacios públicos y las “deep fakes” que alteren la imagen o voz de las personas sin su consentimiento.
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Sistemas de alto riesgo: Comprenden aplicaciones como la identificación biométrica en espacios privados, la evaluación de estudiantes, la selección de trabajadores, y la gestión de programas sociales. Estos sistemas estarán sujetos a estrictos controles y auditorías para garantizar que operen de manera ética y transparente.
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Sistemas de bajo riesgo: Son aquellos que no presentan un peligro significativo para la seguridad o los derechos humanos, pero aún así deben cumplir con estándares de calidad y buenas prácticas.
Protección de Derechos Humanos y Transparencia
Uno de los pilares de la iniciativa es garantizar que el desarrollo y uso de la IA respeten los derechos humanos. Esto incluye prohibir toda forma de discriminación basada en género, edad, origen étnico, discapacidad u otras condiciones. Además, se establece la obligación de informar a los usuarios cuando están interactuando con sistemas de IA y de identificar claramente los contenidos generados o manipulados por estas tecnologías.
La transparencia también es un eje central de la ley. Los desarrolladores y proveedores de SIA deberán garantizar que sus sistemas sean auditables por las autoridades competentes y contar con mecanismos de gestión de riesgos para mitigar posibles efectos negativos.
Propiedad Intelectual y Compensación Justa
La iniciativa también aborda la protección de la propiedad intelectual en el contexto de la IA. Se establece que los desarrolladores de sistemas basados en modelos de lenguaje de gran tamaño (LLM, por sus siglas en inglés) deberán alcanzar acuerdos con los titulares de derechos de autor antes de utilizar sus contenidos para el entrenamiento de algoritmos. En caso de desacuerdos, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) actuará como mediador para garantizar una resolución justa.
Creación de una Comisión Nacional de Inteligencia Artificial
Para supervisar la implementación de esta ley, se propone la creación de una Comisión Nacional de Inteligencia Artificial como órgano consultivo del IFT. Este grupo estará compuesto por cinco expertos en tecnologías de la información y desarrollo tecnológico, quienes desempeñarán un papel clave en el diseño de regulaciones secundarias y en la evaluación de los SIA.
Sanciones y Responsabilidad
La ley incluye un régimen de sanciones para garantizar su cumplimiento. Las infracciones podrán ser castigadas con multas de hasta el 10% de los ingresos anuales del infractor, así como con la suspensión o cancelación de permisos. Además, se prevé la posibilidad de imponer sanciones más severas en caso de reincidencia.
Un Paso hacia el Futuro
La propuesta de la Ley Federal que Regula la Inteligencia Artificial en México representa un avance significativo hacia la construcción de un marco normativo que equilibre la innovación con la protección de derechos fundamentales. Al adoptar un enfoque de riesgos, promover la transparencia y garantizar la protección de los derechos humanos y la propiedad intelectual, esta iniciativa sienta las bases para un desarrollo responsable y ético de la IA en el país.
En un contexto global donde la regulación de la IA aún está en desarrollo, México tiene la oportunidad de liderar con un enfoque que priorice el bienestar social y fomente la colaboración entre todos los actores involucrados. Esta ley no solo es un marco jurídico, sino también una invitación a reflexionar sobre cómo queremos que la tecnología impacte nuestras vidas en el futuro.